Análisis de las plantillas de los World Team 2024 (I parte)

La gran mayoría de plantillas ya están completas y el inicio de la nueva temporada está a la vuelta de la esquina. Buen momento para comenzar una serie de tres artículos que analizan las plantillas de los dieciocho equipos World Team de 2024. Vamos con las primeras seis escuadras.

Hacemos un repaso de las caras nuevas, las despedidas, los nombres más importantes de cada equipo, las expectativas que despiertan de cara a los próximos meses y los jóvenes candidatos a encarnar revelaciones más o menos fulgurantes. Aquí van las seis primeras escuadras que configuran esta primera entrega: Alpecin-Deceuninck, Cofidis, Team Jayco-AlUla, UAE Team Emirates, Arkéa-B&B Hotels y Astana-Qazaqstan.

En estos enlaces puedes recuperar la segunda y la tercera parte:

Alpecin-Deceuninck

Altas: Lars Boven (Jumbo-Visma Development Team), Juri Hollmann (Movistar Team), Timo Kielich, Axel Laurance, Henri Uhlig y Luca Vergallito (Alpecin-Deceuninck Development Team), Stan Van Tricht (Soudal-Quick Step).

Bajas: Dries De Bondt (Decathlon AG2R La Mondiale Team), Alexander Krieger (Tudor Pro Cycling Team), Jakub Mareczko y Kristian Sbaragli ( Team Corratec - Selle Italia), Stefano Oldani (Cofidis), Robert Stannard, Lionel Taminiaux (Lotto Dstny).

Los resultados de 2023 han sido buenísimos y esto probablemente explica la poca necesidad de realizar incorporaciones relevantes. Aun así, suben cuatro corredores del equipo de desarrollo que ya han corrido con “los mayores” en pruebas en las que lo tenían permitido, las no pertenecientes al World Tour. Entre ellos destaca Laurance, vigente campeón del mundo sub23, del que podremos medir si sus cualidades de puncheur ya bastan para competir en las carreras de más alto nivel. Suscita curiosidad parecida, pero en carreras con algo de montaña, el italiano Luca Vergallito, aspirante a ser el nuevo Jay Vine por el hecho de ser también un producto de la Zwift Academy.

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Finalmente, cabe no pasar por alto a Kielich, hombre eminentemente rápido. Del resto de fichajes, Hollmann apuntalará las labores en el llano, y Van Tricht y Boven -aún jóvenes ambos- llegan tras no tener hueco en estructuras superpobladas como Soudal-Quick Step y Jumbo-Visma respectivamente.

Entre las bajas figuran algunos nombres de cierta relevancia, pero a la mayoría no cuesta encontrarles una razón, pues muchos son corredores tirando a veteranos que son reemplazados por los jóvenes mencionados en el anterior párrafo. Quizás sorprende un poco más el adiós de Oldani, un ciclista aún con bastante recorrido, que ha optado por aceptar la propuesta de Cofidis.

Matthieu van der Poel estrenó su nuevo maillot arcoíris en carretera con victoria en la SUPER 8 Classic (Foto: Alpecin-Deceuninck)

Talento emergente 

Claramente los tres nombres promocionados del equipo de desarrollo que menciono en el anterior apartado son los que mejor encajan aquí. De Laurance poco hay que reivindicar, ahora hace un año su fichaje por el filial ya resultaba muy interesante. Ciertamente esta última temporada no estaba siendo muy brillante hasta su victoria en Glasgow, pero todo apunta a que el título mundial sub23 será un espaldarazo para que empiece a ratificar todo lo que apunta.  Vergallito ya cuenta con 26 años pero es prácticamente un recién llegado a la ruta, a pesar de haber competido de adolescente. Escalador espigado, en 2023 ha dado unos primeros pasos en el profesionalismo de carretera bastante esperanzadores. Kielich quizás es menos mediático, pero muestra versatilidad porque además de

Esprintar es un aceptable crosser y también tiene algún resultado notable en carreras con kilómetros cuesta arriba. 

¿Cómo pinta el 2024?

Sanremo, doblete en Roubaix, cuatro etapas y maillot verde en el Tour, campeonato del Mundo, victorias en Giro y Vuelta… Este es el listón que ha dejado 2023 y al que mirarán de acercarse esta temporada con los mismos protagonistas: Van der Poel, Philipsen y Groves. No será nada fácil, hasta el punto que quedarse solo un poco por debajo no sería considerado un fracaso. Además, está lo que se pueda rascar en los Juegos Olímpicos -aunque sus estrellas participen bajo los colores nacionales- y se puede aspirar a que corredores como Kragh Andersen o Hermans se sumen a la senda triunfadora. En cualquier caso, el equipo centrará sus objetivos en clásicas y esprints, puesto que hablamos de una plantilla cuyos mejores escaladores seguramente sean Conci y Vergallito.

Cofidis

Altas: Stanisław Aniołkowski (Human Powered Health), Aimé De Gendt (Intermarché-Circus-Wanty), Nicolas Debeaumarché (St Michel-Mavic-Auber93), Kenny Elissonde (Trek-Segafredo), Milan Fretin (Team Flanders-Baloise), Alexis Gougeard (VC Rouen 76), Ben Hermans (Israel-Premier Tech), Gorka Izagirre (Movistar Team), Oliver Knight (AVC Aix-en-Provence), Nolann Mahoudo (CIC U Nantes Atlantique), Stefano Oldani (Alpecin-Deceuninck), Ludovic Robeet (Bingoal WB).

Bajas: Andre Carvalho (Sabgal-Anicolor), Davide Cimolai (Movistar Team), Simone Consonni (Lidl-Trek), Alexandre Delettre (St Michel-Mavic-Auber93), Victor Lafay (Decathlon AG2R La Mondiale), Rémy Rochas (Groupama-FDJ), Max Walscheid (Team Jayco AlUla), François Bidard, José Herrada, Wesley Kreder, Pierre-Luc Périchon y Jelle Wallays (se retiran).

Muchas entradas y salidas en la estructura aunque la mayoría de ellas no resultan muy relevantes. De los corredores más importantes solo salen Lafay y, tal vez un escalón por debajo, Consonni, Rochas y Walscheid. En cuanto a las altas, tampoco parece que ninguno de ellos vaya a erigirse en estandarte del equipo esta próxima temporada, aunque hombres como Oldani bien pueden tener su protagonismo.

Llegan bastantes veteranos de cierto nombre —el mayor de los Izagirre, Hermans o Elissonde— pero todo apunta a que aportarán más experiencia que resultados, aunque no se les descarta para alguna alegría aislada. Su llegada también se entiende porqué, de la plantilla de 2023, hasta cinco corredores concluyen su carrera. Por último, despierta algo de curiosidad la recuperación de Gougeard, corredor combativo como pocos y con buen motor que viene de pasar una travesía del desierto de un año corriendo en aficionados. 

Ion Izagirre y Simon Geschke celebran la victoria del corredor vasco en la 12ª etapa del Tour de Francia 2023 (Foto: Pauline Ballet / A.S.O.)

Talento emergente 

No sé si hoy en día se puede considerar talento emergente a un ciclista de ya 25 años y que esta última campaña ha sido el tercer corredor del equipo en puntos UCI. Aun así Axel Zingle es quien más se ajusta a esta denominación. Durante todo el año ha demostrado que en pruebas de un día con alguna cota casi siempre está adelante. Pero aún queda pendiente subir un último peldaño: el que le llevaría a ganar más a menudo y elevar estos buenos resultados que ya saca en pruebas 1.Pro o 1.1 a carreras del World Tour. Aún tiene margen para ello.  Más allá de Zingle, pocos corredores jóvenes despiertan mucho interés. Hace un par de años hubiera apuntado a Toumire, pero se le ha visto muy poco desde su 5º puesto en el Tour del Avenir de 2021.   

¿Cómo pinta el 2024?

No excesivamente ilusionante, con franqueza. Sus hombres más capacitados son los mismos que el año pasado y, salvo sorpresas como el mencionado hipotético despunte de Zingle, ya sabemos qué nos pueden ofrecer. Guillaume Martin, Ion Izagirre y Bryan Coquard son buenos ciclistas y suelen entregar resultados, pero a estas alturas difícilmente pegarán un salto de rendimiento. Cabrá esperar que sigan cumpliendo y, a poder ser, entre unos y otros repitan el éxito del pasado Tour de Francia, en el que consiguieron dos victorias de etapa tras años de sequía. Por lo que respecta al resto del año, a sumar todos los puntos UCI que puedan, sobre todo en las muchas pruebas de un día francesas y belgas: probablemente es una de las escuadras que, al inicio de 2025, deberá sacar la calculadora para pasar el corte del trienio 2023-2025 que garantiza tres campañas más en primera división.

Team Jayco-AlUla

Altas: Davide de Pretto (Zalf Euromobil Fior), Caleb Ewan (Lotto Dstny), Anders Foldager (Biesse-Carrera), Luke Plapp (INEOS Grenadiers), Mauro Schmid (Soudal-Quick Step), Max Walscheid (Cofidis).

Bajas: Kevin Colleoni (Intermarché-Wanty), Matteo Sobrero (BORA-hansgrohe),  Zdeněk Štybar (se retira), Alexandre Balmer, Tsgabu Grmay y Lukas Pöstlberger (aún sin equipo conocido en el momento de cerrar este artículo).

Uno de los equipos que sale mejor parado de la ventana de traspasos, bajo mi punto de vista y siempre en relación a las posibilidades de la estructura. Incorporan seis corredores, todos interesantes a su modo. Ewan no parece estar en el momento más álgido de su carrera, pero aun así puede volver a ser de los mejores sprinters del año si sale de una dinámica algo negativa, más mental y de poca fortuna que física; para ello, qué mejor que volver a casa.

Schmid ha sido de lo mejorcito de 2023 de Soudal-Quick Step y a sus 24 años recién cumplidos parece a punto para dar otro paso adelante en un equipo en el que gozará de oportunidades. Por su parte, Plapp ha alternado en INEOS Grenadiers momentos de brillantez con signos de desubicación. Con la incorporación al mejor equipo de su país debe disipar dudas y asentarse; en él hay un proyecto de hombre de generales en ciernes. El gigantón Walscheid es un buen refuerzo para clásicas llanas, con o sin adoquín, un aspecto en el que el equipo no anda muy sobrado de recursos. Además, también puede ser un muy buen elemento para armar un tren para alguno de los velocistas del equipo.

El australiano Luke Plapp es una de las grandes incorporaciones del equipo tras sus tres primeras temporadas como profesional en las filas de INEOS (Foto: Getty)

Finalmente, con De Pretto y Foldager dan la alternativa a dos jóvenes ciclistas que en 2023 han tenido un paso notable por el calendario sub23. Ambos se han desenvuelto bien en pruebas de un día, pasando cotas y con capacidad de remate.
Entre las bajas, cabe lamentar sobre todo la de Sobrero, aunque tampoco debe ser una pérdida dramática. Las demás son totalmente comprensibles, ya sean debidas a la veteranía (Stybar) o a no acabar de cuajar (Balmer). 

Talento emergente 

A los nombres mencionados de De Pretto y Foldager cabe sumar un puñado de nombres interesantes que debutaron este 2023 y entre los que cuesta decantarse por uno: entre los Peña, Porter, Quick, Berhe o Engelhardt, quizás apostaríamos con algo más de convicción por este último, por haber destacado ya en carreras de cierto nivel, sobre todo en clásicas algo duras y como cazaetapas.
Un peldaño por encima en cuanto a ser nombres algo más consolidados, Zana y los mencionados Schmid y Plapp aún podrían encajar en este párrafo: por edad y por poseer todavía margen de mejora.

¿Cómo pinta el 2024?

En consecuencia a lo expuesto en los dos anteriores apartados, espero que sea uno de los equipos que mejore más sus resultados de la temporada pasada. A todos los nombres ya apuntados, cabe sumar los de quienes ya son puntales del equipo: Simon Yates, Michael Matthews, Dylan Groenewegen y, en menor medida, Eddie Dunbar tras su buen último Giro d’Italia.

Yates aún no ha definido oficialmente sus objetivos para 2024 pero algunas informaciones le sitúan en el Giro, en el que partiría como uno de los máximos favoritos. Matthews no tiene muy difícil mejorar su última campaña, puesto que además de la victoria de etapa en Italia y el podio en Québec (en una carrera que ya ha ganado dos veces), poco más se puede destacar. Es probable que vuelva al Tour de Francia tras un año de ausencia, donde compartirá galones con Groenewegen. Esto sitúa a Ewan como el velocista del equipo en el Giro.

El británico Simon Yates continúa capitaneando la estructura australiana (Foto: Jayco-AlUla)

Más allá de las grandes vueltas, se trata que los dos hombres rápidos de primera línea que posee la plantilla vayan sumando victorias, que Matthews asome también en clásicas de distinto pelaje y que la segunda línea que conforman los Dunbar, Zana, Plapp, Schmid, Harper y compañía dé la medida de su potencial: en escapadas, en vueltas cortas y en la gran variedad de escenarios que el calendario ofrece a lo largo del año.     

UAE Team Emirates

Altas: Igor Arrieta (Equipo Kern Pharma), Filippo Baroncini (Trek-Segafredo), Isaac del Toro (A.R Monex Pro Cycling Team),  Jan Christen y António Morgado (Hagens Berman Axeon), Nils Politt (Bora-hansgrohe), Pavel Sivakov (INEOS Grenadiers).

Bajas: Pascal Ackermann y George Bennett (Israel Premier-Tech), Davide Formolo (Movistar Team), Ryan Gibbons (Lidl-Trek), Felix Groß (Rad-Net Oßwald), Jan Polanc (se retira) y Matteo Trentin (Tudor Pro Cycling Team)

El equipo de Gianetti y Matxin sigue fiel a la práctica de usar su elevado presupuesto para reclutar principalmente a algunos de los mejores corredores del campo sub23. Más que fichar estrellas, fichan estrellas potenciales, y esta vez han conseguido firmar a tres nombres más que interesantes: el mexicano Del Toro, flamante ganador sorpresa del Tour de l’Avenir; el suizo Christen, un claro proyecto de vueltómano que de hecho ya corre con el equipo desde el pasado septiembre; y el portugués Morgado, alguien capaz de encadenar dos medallas de plata mundialistas seguidas, el 2022 en juniors y este último año en sub23. Arrieta y Baroncini ya tienen algo más de experiencia en profesionales, llevan un par de campañas curtiéndose y ahora parecen listos para empezar a sacar a relucir su potencial, el primero más escalador y el segundo más clasicómano.

Este contingente rebosante de juventud se complementa con dos incorporaciones más asentadas y de nivel. Politt refuerza el bloque de clásicas del norte (ojo con él en Roubaix) y al mismo tiempo será un gregario inmejorable para el llano al servicio de Pogačar, un reemplazo a la altura para cubrir el adiós de Trentin. Sivakov, por su parte, es otra pieza más para rodear al esloveno de oro o a quien haga falta en las mejores vueltas por etapas, sin descartar que encuentre ocasiones para el brillo individual, sobre todo si esquiva su tendencia a los percances. Quizás aún no ha cumplido las altísimas expectativas con las que pasó a profesionales, pero esta última temporada ha sido tal vez la más sólida de su trayectoria y, con solo 26 años, está a tiempo de seguir mejorando.

En total, media docena larga de incorporaciones que, sumando calidad y potencial futuro, mejoran bastante las bajas. Tal vez las de Trentin y Formolo sean las más añoradas de aquí unos meses, aunque se comprende que su ciclo en el equipo había llegado a su fin y ambos han superado ya la treintena. 

Talento emergente 

Uno echa una mirada concienzuda a esta plantilla, ordena por edad a sus ciclistas y debe reconocer que de Pogačar para abajo todos encajan en esta categoría. Hemos hablado ya de los recién incorporados Baroncini, Arrieta, Del Toro, Morgado y Christen, pero es que Ayuso solo tiene 21 años. A pesar de haber pisado ya el podio de una gran vuelta, entre otras muestras de su rendimiento de auténtico crack, pocos dudan que su mejor versión aún está por venir, tras una primera parte de 2023 lastrada por una lesión que no acababa de sanar.

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Como apuesta un poco menos evidente, considero que Fischer-Black puede ser el corredor del equipo que dé el mayor paso al frente este 2024, tras una última campaña en la que ha ido dejando detalles de su potencial. La mayor adversidad le puede llegar por la retahíla de grandes ciclistas que todavía tiene por delante en la jerarquía de la plantilla. 

¿Cómo pinta el 2024?

Lleva dos temporadas sin ganar ninguna vuelta de tres semanas, pero no hay activo en el ciclismo mundial como Pogačar. Es por lo que es capaz de ganar -de una variedad inaudita al menos en este siglo-, y también por el cómo, con la propina su carisma maravillosamente directo y franco. Esta temporada añade una novedad muy significativa a su calendario: participará en el Giro d’Italia.

El plan es correr también luego el Tour pero se diría que aspira a ampliar palmarés en la corsa rosa, donde salvo sorpresas será favorito indiscutible, para así presentarse en Francia con los deberes hechos y poco que perder ante un Vingegaard hegemónico. A finales de septiembre intentar asaltar el arcoiris en Zurich, sobre un trazado que se antoja favorable. Y también están los Juegos Olímpicos, Strade Bianche, Volta a Catalunya y demás, aunque no se le puede pedir —ni siquiera a él— que esté todos los meses al 100% teniendo que afrontar el reto Giro-Tour. Donde parece casi seguro que no lo veremos es defendiendo título en Flandes.

Tadej Pogačar celebra en el podio su triunfo en el Tour de Flandes 2023 (Foto: Flanders Classics)

Más allá del esloveno, no son pocos los hombres del equipo capaces de cosechar resultados. Hemos mencionado todos los jóvenes talentos por consolidar y a los ya consolidados, pero es que aún nos quedaría destacar a unos cuantos ciclistas que serían líderes en no pocos equipos del WT y lo serán en las carreras en las que no coincidan con Pogačar: Adam Yates, podio en el último Tour de Francia, solo superado por los dos extraterrestres, y capaz de ganar tanto vueltas de una semana como clásicas con dureza; Joao Almeida, podio en el último Giro y siempre ahí, en las posiciones nobles de las vueltas por etapas, de febrero a septiembre; Brandon McNulty, quién a sus 25 años ha conseguido bastante pero aún se le puede pedir más, porque lo puede dar; Marc Hirschi, clasicómano y cazaetapas de gran talento que en 2023 ha empezado a parecerse a aquel joven prodigio que asombró en la corta temporada 2020; Jay Vine, escalador inefable, capaz de lo mejor cuesta arriba pero aún lastrado por su falta de habilidad para sortear caídas, cortes y demás percances; Juan Sebastián Molano, velocista juguetón y hábil en ciertas clásicas que parece haber alcanzado la madurez. Y aún nos faltaría mencionar a corredores del espesor de Ulissi, Wellens, Soler, Bjerg, Großschartner, Majka, Covi y compañía que andarán buena parte del año en roles secundarios pero cuyo talento les debe permitir aprovechar en un momento u otro la amplitud del calendario.       

Arkéa-B&B Hotels

Altas: Vincenzo Albanese (EOLO-Kometa), Raúl García Pierna (Equipo Kern Pharma), Laurens Huys (Intermarché-Circus-Wanty), Miles Scotson (Groupama-FDJ), Florian Sénéchal (Soudal-Quick Step), Clément Venturini (AG2R Citroën Team).

Bajas: Warren Barguil (Team dsm-firmenich PostNL), Hugo Hofstetter (Isreal-Premier Tech), Andrii Ponomar (Team Corratec-Selle Italia), Clément Russo (Groupama-FDJ), Maxime Bouet, Nacer Bouhanni y Laurent Pichon (se retiran), Nicolas Edet (aún sin equipo conocido en el momento de cerrar este artículo).

La lista que precede a estas líneas ya invita al optimismo, pero para ver la foto completa habría que sumarle el nombre de Arnau Démare, que avanzó su incorporación al pasado mes de agosto y es probablemente no solo el fichaje más destacado sino también el principal activo deportivo y mediático de la plantilla. Sustituye en este honor a Warren Barguil, que regresa a la estructura que le ofreció el paso a profesionales. En cierto modo, Démare también sustituye, como hombre rápido referencia, a Nacer Bouhanni, su archienemigo deportivo histórico, que no ha sido capaz de volver al nivel deseado tras la gravísima caída que sufrió el 2022 en Turquía.

Pero ojo, que la estructura de Emmanuel Hubert también incorpora a dos ciclistas que pueden ser los siguientes en una hipotética jerarquía de la plantilla. Hablamos, por una parte, de Florian Sénéchal que, tras aprender todo lo aprendible de las clásicas del norte en las distintas encarnaciones de Quick-Step, vuelve a un equipo francés donde gozará de más espacio para el lucimiento personal. El otro nombre, y tal vez una elección más subjetiva, es el de Vincenzo Albanese, un corredor que ya iba mereciendo estar en un WT y correr pruebas de primer nivel sin estar pendiente de invitaciones. Rápido, correoso, hábil para superar cotas, debe aportar mucho tanto en pruebas de un día como vestido de cazaetapas en vueltas. Además, con 27 años, parece estar llegando al momento de la verdad de su carrera.

El resto de fichajes resultan también muy razonables, con Scotson apuntalando el entourage de Démare, Venturini para ocupar el hueco que dejan tipos rápidos como Hofstetter o Russo, Huys para reforzar el modesto bloque de perfil escalador y, finalmente, García Pierna que está ante la ocasión de demostrar qué se puede esperar de un corredor que lleva años sonando entre lo más interesante del futuro del ciclismo español. 

Raúl García Pierna luce los colores como Campeón de España de Contrarreloj en 2023 (Foto: Equipo Kern Pharma)

Talento emergente

A diferencia de Cofidis, Arkéa - B&B Hotels sí que posee algún corredor menor de 23 o 24 años al que seguir con cierto interés. Además del mencionado García Pierna, Vauquelin es el más evidente. Tras un 2022 de irrupción, esta última campaña ha ido un poco de más a menos. No ha acabado de estallar a lo grande pero sí que ha reafirmado que en él hay un corredor interesante y versátil: media montaña, contrarreloj, ciertas pruebas de un día, vueltas cortas y el tiempo dirá si algo más. Cumple los 23 en abril, así que tiene todo el crédito del mundo para corroborar los buenos presagios.

Con más prudencia, también es bueno tener bajo la lupa a tres corredores prácticamente homófonos como Le Berre, Verre y Barré (el primero se ha pasado buena parte de 2023 en fuga, con mención especial por la del Omloop Het Nieuwsblad) y al más joven de la plantilla: Ewen Costiou. 

¿Cómo pinta el 2024?

Con una plantilla que ha renovado buena parte de sus mejores hombres, las ilusiones deben presentarse también renovadas al inicio de temporada. Démare regresará al Tour, donde luchará por alguna victoria que se presenta difícil pero para nada descabellada, pero su misión no termina ahí: se encargará de sumar triunfos y puntos UCI a lo largo del año.

No asumirá la responsabilidad en solitario, puesto que los mencionados Sénéchal, Albanese y Vauquelin pueden contribuir a sacar un buen botín de resultados. El italiano probablemente cubrirá buena parte del calendario de su tierra y no resulta utópico que pueda regresar de Tirreno, Giro y ciertas pruebas de un día con alguna victoria bajo el brazo y —eso casi seguro— un puñado amplio de top10. Además, en esa segunda línea de la plantilla hay que contar con la aportación de nombres de nivel como Mozzato (una garantía de buenos puestos), el irregular Dekker y un talento para las clásicas a medio consolidar como Louvel.

Foto: Franz-Renan Joly

El equipo es algo más flojo en la montaña y eso le hace tener pocas opciones en las generales de vueltas por etapas, pero además de lo que pueda seguir creciendo Vauquelin, hay que contar con las opciones de hombres como Champoussin o Cristián Rodríguez.   

Astana-Qazaqstan Team  

Altas: Davide Ballerini y Michael Morkov (Soudal-Quick Step), Anthon Charmig (Uno-X Pro Cycling Team), Lorenzo Fortunato (EOLO-Kometa), Michaele Gazzoli, Harold Martín López y Nicolas Vinokurov (Astana Qazaqstan Development Team), Max Kanter (Movistar Team), Anton Kuzmin (Almaty Astana Motors), Daniil Marukhin (Vino SKO Team), Henok Mulubrhan (Green Project-Bardiani CSF-Faizanè), Ide Schelling (BORA-hansgröhe), Rüdiger Selig (Lotto Dstny), Santiago Umba (GW Shimano-Sidermec).      

Bajas: David de la Cruz (Q36.5 Pro Cycling Team), Fabio Felline (Lidl-Trek) Martin Laas (Ferei Quick-Panda Podium Mongolia Team), Gianni Moscon (Soudal-Quick Step), Javier Romo (Movistar Team), Leonardo Basso, Joe Dombrowski, Yuriy Natarov, Nurbergen Nurlykhassym, Alexandr Riabushenko y Andrey Zeits (aún sin equipo conocido en el momento de cerrar este artículo), Manuele Boaro, Davide Martinelli, Antonio Nibali y Luis León Sánchez (se retiran).

Vinokurov ha cambiado literalmente medio equipo. Viendo que cerca de diez de las bajas son de corredores retirados o, al menos por ahora, sin contrato para la siguiente temporada, la decisión de hacer cambios profundos parece razonable. Otro tema es juzgar si los que llegan resultan incorporaciones acertadas o no, y aquí aparece en escena el nombre de un corredor que ya formaba parte de la plantilla: Mark Cavendish. Buena parte de los fichajes son de ciclistas cuya misión será apuntalar el treno del británico ante el máximo objetivo de volver a lograr una victoria en el Tour de Francia, la que le haría superar a Merckx. Así, han convencido al veterano Morkov, también a Selig, ambos lanzadores contrastados, pero también hay nuevos hombres rápidos de cierta entidad como Ballerini o Kanter.

Más allá de ese ámbito llegan dos corredores jóvenes a los que seguir, que ya han brillado en carreras de menor nivel y a los que habrá que ver contra los mejores: hablamos del eritreo Mulubrhan y del colombiano Umba, escalador que solo cuenta con 21 años a pesar de llevar temporadas sonando. Más consolidado es Fortunato, a quien el Eolo-Kometa se le estaba quedando algo pequeño y puede que sea la principal opción del equipo para el Giro. Charmig y Schelling, corredores hasta ahora más de destellos que de rendimiento sólido, completan un apartado de altas que resulta algo extraño pero a la vez interesante. Entre las bajas, además de a un De la Cruz que sin estar ya en su máximo nivel seguía siendo pieza útil, tal vez añoren a Romo si acaba consolidándose en Movistar. 

Talento emergente

Los mencionados Mulubrhan y Umba quizás son quienes despiertan más curiosidad entre los jóvenes, pero no son los únicos. De Syritsa sinceramente ya esperaba algo más la temporada pasada pero hay que concederle que ni mucho menos todos los grandes ciclistas lo son ya desde su primer año como profesionales. El velocista ruso, con un físico quizás más de balonmano que de ciclismo, tiene tiempo para ir puliendo sus carencias y sacar el potencial que parece atesorar. Si queremos ampliar el radar a otros corredores con potencial de crecimiento, parece buena idea fijarse en Harold López y Gianmarco Garofoli.

¿Cómo pinta el 2024?

Ya hemos visto que la exposición mediática que aportaría batir con Cavendish el récord de victorias de Merckx ocupa buena parte del foco del equipo. Pero claro, con los ciclistas veloces y rodadores que ya había en el equipo, todos no caben en el séquito del británico, así que es razonable pensar que alguno de ellos correrá bajo otras consignas. Tal vez a Bol se le dará vía libre en carreras alternativas? También a Kanter, con Selig de lanzador? Lo que parece seguro es que Ballerini gozará de libertad en bastantes clásicas del norte, no en vano es un antiguo vencedor del Omloop Het Nieuwsblad.

El otro pilar de la plantilla, un año más, es Lutsenko. El kazajo maquilló en campeonatos nacionales, continentales y carreras menores un 2023 bastante decepcionante en los grandes escenarios. Los puntos UCI que sacó en favor del equipo no impiden exigirle algo más este 2024, ya sea en grandes vueltas o en clásicas de nivel World Tour.

Antes hemos mencionado a Ballerini y a Fortunato, pero hay más talento italiano en el equipo: Battistella y el campeón nacional Velasco encarnan un perfil de corredor -rapidito, combativo, con punch en cotas, todo muy típicamente transalpino- que en esta plantilla, sin líderes claros para las generales, gozará de libertad durante casi todo el año.  

Imagen de cabecera: Alen Milavec 

 

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