La tercera jornada tendrá una distancia similar a la segunda, aunque supone un reto mayor al tratarse de la etapa con mayor dureza del Tour de Francia femenino hasta el momento. La carrera comienza en la capital de la región de Champagne, Reims, con su gran catedral y su mezcla de arquitectura románica y gótica. La ciudad se aleja de los municipios más rurales del día anterior antes de dirigirse a los impresionantes viñedos de la zona.
En cierto modo, se trata de una reminiscencia de la etapa equivalente en el Tour de Francia masculino en 2019 que concluyó en Épernay. Una jornada recordaba al ser el lugar en el que Julian Alaphilippe se enfundó su primer maillot amarillo tras atacar en la dúrisima cota final. Fue el inicio de un idilio con el liderato que se mantendría hasta las últimas etapas alpinas en la que el sueño de ‘Loulou’ se acabó esfumando en favor de Egan Bernal después de haber soñado durante gran parte del recorrido.
Recorrido de la 3ª etapa: Reims - Épernay (133,6 km)
La jornada arranca en Reims y, tras los primeros 20 kilómetros, las ciclistas deben afrontar la Côte de Trepali. Se trata de una subida corta, tan solo un kilómetro de longitud, con una pendiente del 5% que podría ser el punto para que se produzca la consolidación de la escapada del día después de un inicio un tanto explosivo. A partir de ese momento se abre un periodo superior a los 50 kilómetros de relativa calma sobre el terreno llano de la región de Champagne.
Un tramo que será la antesala de unos últimos 55 kilómetros sobre una ruta de características distintas y marcada por la sucesión de pequeñas cotas y repechos. Esta parte final se encargará de aumentar la tensión en el pelotón y se inicia con el paso por la Côte de Vertus y la Côte de Mesnil-sur-Oger, separadas por poco más de 10 km. Cada una de ellas mantiene el estilo al tratarse de una rampa corta, pero con porcentajes que ya comienzan a ser más exigentes en torno al 7% y que podrían comenzar a dividir el pelotón.
El último bloque del día será un circuito alrededor de Épernay. Será el momento en el que se produzcan los movimientos decisivos ya que los últimos 15 kilómetros cuenta con dos subidas exigentes. La primera de ellas es un auténtico muro, la Côte de Mutigny, posiblemente el lugar indicado para lanzar el ataque ganador con sus rampas superiores al 12% en sus 900 metros de longitud. Un rápido descenso conduce a las ciclistas hacia el Mont Bernon, una cota bonificada en su cima con una pendiente media del 4,6% y que se corona a falta de tan solo 4 kilómetros para la línea de meta.
Segmentos destacados
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| Côte de Vertus | Côte du Mesnil-sur-Oger |
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| Côte du Mutigny | Mont Bernon |
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Favoritas
Tras una segunda jornada que ha dejado las primeras diferencias entre alguna de las implicadas en la general, esta etapa presenta un perfil interesante para que se produzcan movimientos al estilo clásica para comenzar a establecer las posiciones en la batalla por el maillot amarillo. No se trata de un día en el que se acumula mucha dureza, pero el terreno repleto de cotas de la parte final permite pensar en que el pelotón no llegará ni mucho menos compacto.
En este sentido, las ciclistas que fueron protagonistas durante la temporada primaveral se convierten en las principales candidatas para hacerse con el triunfo en Épernay. Corredoras como Annemiek van Vleuten (Movistar Team), Demi Vollering (Team SD Worx), Elisa Longho Borgini (Trek-Segafredo) o la propia Mavi García (UAE Team ADQ) tratarán de romper el grupo durante la Côte de Mutigny para marcharse en solitario y evitar así que las ciclistas como Marianne Vos (Jumbo Visma), líder de la carrera, Elisa Balsamo (Trek-Segafredo) o Lotte Kopecky (Team SD Worx) se involucren en la pelea por la victoria parcial.
Imagen de cabecera: ASO/Romain Laurent
