La montaña y el Tour de Francia forman un binomio que se ha mantenido en la esencia de la carrera desde su primera edición en 1904. Y en esa relación, junto a los Pirineos, los Alpes juegan un papel primordial. Cimas elevadas, carreteras sinuosas, espectadores animando a los ciclistas —a veces demasiado cerca— y, sobre todo, el relato de las batallas que se libran en un entorno que en invierno está repleto de nieve y pistas de esquí. La cordillera alpina ha sido la encargada de despedir la segunda semana del Tour con un bonito espectáculo en dos etapas con más de 4.000 metros de desnivel.
El aperitivo del fin de semana fue obra del polaco Michal Kwiatkowski (Ineos Grenadiers), quién abrió el apetitivo con su brillante actuación en el Grand Colombier. Esa pequeña incursión en los Monte Jura dio paso a dos etapas en las que Carlos Rodríguez (Ineos Grenadiers), en Morzine, y Wout Poels (Bahrain-Victorious), en Saint-Gervais Mont Blanc, consiguieron alzar los brazos. Mientras tanto, Jonas Vingegaard (Jumbo-Visma) y Tadej Pogačar (UAE Team Emirates) mantenían una intensa batalla por el maillot amarillo, mantiendo un férreo marcaje al hombre que terminó con empate técnico y solo diez segundos de diferencia antes de la semana decisiva.
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El fotoperiodista James Startt, enviado especial en el Tour de Francia para VOLATA y Rouleur, ha captado toda la acción desatada en las carreteras de los Alpes.
Jonas Vingegaard avanza a través del pasillo habilitado para que los portadores de los diferentes maillots se sitúen en las primeras posiciones en la salida de la 14ª etapa.
El público espera impaciente que el pelotón comience una de las primeras subidas del día.
El equipo Jumbo Visma lideró la mayor parte de la jornada, y en ese trabajo Wout Van Aert jugó un papel esencial marcando el ritmo en cabeza.
Tadej Pogačar intenta refrescarse en la parte más exigente del Col de la Joux Plane en un día caluroso.
Thibaut Pinot se filtró una vez más en la escapada, pero su particular búsqueda de una última victoria de etapa en el Tour antes de retirarse al final de la temporada deberá continuar.
Pogačar en cabeza tras coronar el Joux Plane después de que su ataque 500 m antes de la cima se viera frustrado por una moto de televisión y otra de fotógrafo. Y Carlos Rodríguez asomándose antes de lanzarse en el descenso a por su primera victoria en el Tour.
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Tadej Pogačar baja del autobús de su equipo en la salida de la 15ª etapa con un brazo lleno de maillots blancos firmados para lanzárselos a los aficionados que le esperaban.
Al igual que en la 14ª jornada, una caída masiva, en este caso provocada por un espectador que intentaba hacerse un ‘selfie’, comprometió también los primeros kilómetros de la 15ª etapa. Biniam Girmay fue uno de los ciclistas que se fue al suelo.
El día anterior, uno de los implicados en la caída que pudo seguir en carrera fue el francés Adrien Petit, quien en la 15ª etapa tuvo problemas para llegar dentro del límite de tiempo. En meta fue galardonado con el premio al corredor más combativo por su capacidad y sacrificio para conseguir terminar.
La escapada numerosa que protagonizó la 15ª etapa alcanza la cima del Col de la Forclaz.
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Pogačar durante el sinuoso descenso del Col de la Forclaz.
Vingegaard observa el macizo de Aravis, donde se encontraba la siguiente subida de la jornada.
Guilio Ciccone (derecha) y Guillaume Martin lideran la escapada durante el ascenso al Col des Aravis.
No, no es el Día de la Bastilla —lo fue la jornada del viernes con final en el Grand Colombier—, pero las banderas francesas ondeaban mientras el pelotón ascendía el Col des Aravis.
Wout Poels consiguió abrir el hueco durante la dura subida de la Côte des Amerands antes de afrontar la ascensión final a Saint Gervais Mont Blanc. De esta forma, cimentó su primer triunfo de etapa en una gran vuelta.
Los inmediatos perseguidores del neerlandés eran Wout van Aert y Marc Soler, quien había desatado las hostilidades en la escapada en la última parte de Aravis.
El momento en el que Adam Yates abre un pequeño hueco a Pogačar y Vingegaard a pocos kilómetros de la cima de Saint Gervais en una estrategia un tanto extraña por parte del equipo UAE Team Emirates
La otra carrera, la de los rezagados. Mathieu van der Poel recibe el ánimo incondicional del público mientras se encamina de manera relajada a la meta de la 15ª etapa.
El regreso a los autobuses en jornadas de montaña se realiza por la misma carretera que se asciende, por lo que el Tour de Francia suministra silbatos a los ciclistas que han acabado la etapa para avisar tanto el público como a los corredores que todavía no han finalizado. En esta foto vemos a Chris Hamilton (Team DSM) y Alexey Lutsenko (Astana-Qazaqstan).
