La arquitectura modernista y los canales de Utrecht vuelven a ser protagonistas durante la segunda jornada de la Vuelta a España. Esta ciudad neerlandesa, conocida como una de las capitales mundiales de la bicicleta por su infraestructura de movilidad sostenible, tiene la particularidad de ser el primer lugar que ha formado parte del inicio de las tres grandes vueltas: Giro 2010, con victoria al esprint de Tyler Farrar; Tour 2015, en una contrarreloj en la que se impuso Rohan Dennis; y, ahora, Vuelta 2022.
La jornada en la que los velocistas tendrán su primera oportunidad de brillar en esta edición de la ronda española partirá de s’Hertogenbosch, que se estrena como sede de la Vuelta. Aún así, este núcleo urbano al sur de los Países Bajos ya ha sido partícipe en el Tour de Francia de 1996. Acogió el prólogo inaugural, con triunfo para Alex Zülle, y la primera etapa en línea, en la que Frédéric Moncassin fue el más rápido en una llegada masiva.
Recorrido de la 2ª etapa: s’Hertogenbosch - Utrecht (175,1 km)
La segunda jornada será la primera oportunidad para los velocistas de sumar el triunfo parcial e introducirse en la batalla por el maillot verde. Se trata de una jornada mayoritariamente plana recorriendo parte de la llanura interior neerlandesa camino de la ciudad que el día anterior acogió la gran inauguración de la carrera, Utrecht. Los primeros 80 kilómetros transcurren prácticamente al nivel del mar, sin una sola ondulación.
A partir de ese punto, desde la ciudad de Rhenen aparece un terreno ligeramente sinuoso en el que se asciende la única dificultad del día, la colina de Amerongse Berg (2,1 km al 2,4%), en la que se repartirán los primeros puntos del maillot de la montaña entre la previsible fuga consentida. A pesar de ser una zona interior de Países Bajos, la orografía plana y el recorrido muy abierto y expuesto podría facilitar que el viento característico de las áreas de costa pudiera adentrarse y ser un elemento con incidencia en carrera.
Sin duda, se trata de la opción más probable para que haya mayores alicientes en una etapa que parece muy plácida para el pelotón. Aún así, los constantes cambios de dirección de la ruta podrían frenar el ímpetu de los equipos interesados en caso de que aparezca un elemento como el viento, pues la zona más propicia para estos movimientos se encuentra muy lejos de la meta. La única realidad que se puede anticipar es que veremos una llegada masiva en las calles de Utrecht con unos últimos 18 km sencillos para controlar y preparar el esprint.
Favoritos
El perfil del velocista no es una figura que se prodigue mucho en la Vuelta a España. El recorrido no favorece su presencia y potencia a un tipo de corredor más versátil. Aún así, el inicio en Países Bajos abre una ventana de oportunidades, como si se tratase de una especie de oasis, para que los esprinters puedan mostrar su mejor versión en las volatas. En este sentido, se presenta una bonita batalla entre los ciclistas rápidos del pelotón en una edición de la ronda española en la que sí gozarán de varias etapas en las que brillar.
El belga Tim Merlier (Alpecin-Deceuninck) es uno de los grandes favoritos para estrenar su casillero en el palmarés de la Vuelta y entrar en el selecto club de ciclistas que han logrado al menos una victoria en las tres grandes vueltas. La temporada anterior logró imponerse en el Giro y el Tour, por lo que tras anunciarse su fichaje por Quick Step de cara al 2023 querrá despedir el año ganando en la ronda española.
Junto al belga, Sam Bennet (Bora-Hansgrohe) es el otro gran candidato a hacerse con la victoria en este tipo de llegadas. El irlandés quedó apeado de poder participar en el Tour de Francia, pero en la Vuelta espera recuperar su mejor versión con parte del equipo, a pesar de pelear por la general con Hindley, pensado para arroparlo y sumar triunfos parciales. También hay que incluir en la ecuación a Pascal Ackermann (UAE Team Emirates). Es cierto que el alemán no cuenta con un equipo diseñado para él, pero ya conoce la victoria en las grandes vueltas tras sus dos triunfos tanto en el Giro de 2019 como en la Vuelta de 2020.
El cuarto ciclista en discordia podría ser el francés Bryan Coquard (Cofidis). Llegaba con la ilusión y la sensación de que este año lograría su primer triunfo en el Tour, pero su positivo en Covid a última le apartó de la ronda francesa. A sus treinta años se estrena en la Vuelta, por lo que buscará superar el muro de conseguir la victoria en una gran vuelta. También habrá que estar muy atentos a las opciones de ciclistas como Mads Pedersen (Trek-Segafredo), Kaden Groves (Team BikeExchange), Mike Teunissen (Jumbo-Visma), Magnus Cort (EF Education-Easy Post) o Alex Aranburu (Movistar Team).
