Tour de Francia Femenino, 4ª etapa: la victoria "on fire" de Yara Kastelijn
A la segunda va la vencida. Después del chasco del día anterior, en el que Julie Van de Velde fue cazada a doscientos metros de meta, el equipoFenix-Deceuninck lo ha vuelto a intentar y esta vez, el espíritu competitivo de la escuadra belga ha vuelto a ser determinante para la mejor victoria que han conseguido nunca con Yara Kastelijn.
El equipo Fenix-Deceuninck lleva dos jornadas siendo el equipo más combativo de este Tour Femenino y, según su director deportivo, Michel Cornelisse, eso les da la seguridad de que pueden ir con la cabeza bien alta: “No somo el equipo más grande, pero hasta el momento estamos siendo el mejor equipo del Tour», afirmaba con cierta euforia contenida y con una enorme sonrisa después de la cuarta etapa con final en Rodez. Atiende con toda la generosidad del mundo a la prensa que se ha acercado al bus del equipo cuando ha saltado la noticia: Yara Kastelijn, una joven corredora de veinticinco años de la escuadra belga ha conseguido la victoria de etapa. Lo ha logrado en la jornada más larga de esta edición, de 177,5 km —¿la más larga de la historia del ciclismo femenino?— por la ondulada geografía de Occitania.
Relacionado – Tour de Francia Femenino 2023: recorrido, etapas y perfiles
Relacionado – Suscríbete a VOLATA, tu revista de cultura ciclista
Kastelijn ha entrado en solitario en meta como única representante de la fuga del día, que ha contado con catorce integrantes, algunas de muchos quilates como Lucinda Brand (Lidl-Trek), Sheyla Gutierrez (Movistar) y Audrey Cordon-Ragot (Human Powered Health), y que han llegado a tener hasta 10’35’’ de ventaja sobre el pelotón. Eso ha hecho que la mejor clasificada de ese grupo, la francesa Cordon-Ragot (a + 02’ 21’’) fuera virtual maillot amarillo durante muchos kilómetros. Sin embargo, cuando quedaban cerca de 30 km para meta, en la Côte de Colombiès, desde el grupo principal han empezado a recortar la distancia y a 20 km de meta, Kastelijn ha atacado en la Côte de Moyrazès (4,6 km, al 5,5%) para irse en solitario hacia la meta. Era como si quisiera terminar la fuga que su compañera Julie Van de Velde no pudo completar el día anterior en Montignac-Lascaux.
Foto de Thomas Maheux
Cornelisse que ha asegurado que el objetivo de hoy para el equipo era sumar más puntos para la clasificación de la montaña, pero, voilà!, se han encontrado de nuevo en el frente. Así, y mientras por detrás Lotte Kopecky empezaba a endurecer la carrera para Demi Vollering, por delante Kastelijn ha sabido gestionar las diferencias para llegar en meta con 1’11’’ sobre las perseguidoras.
Foto de Charly López
“Creo que esta victoria demuestra que el equipo está on fire”, comenta la corredora del Fenix-Deceuninck al conseguir hoy su primera victoria en carretera. “El año pasado hablé con mi entrenador para centrarme menos en el ciclocross, porque creo que puedo hacer bien en carretera. En las clásicas de primavera estaba disgustada porque no pude conseguir resultados, así que ganar hoy es fantástico”. También ha confesado ha sido la distancia más larga que ha hecho nunca en bici. “Hacer distancias muy largas en bici no me gusta, porque es muy aburrido —asegura con una sonrisa—, así que hoy he intentado guardar, comer y beber todo lo posible, porque eso podría marcar la diferencia al final. De hecho nuestro entrenador había hecho un plan esta mañana que he seguido al dedillo y esa es la razón por la que al final tuve energía para afrontar los últimos kilómetros”.
Relacionado - Tour de Francia Femenino, 3ª etapa: Julie Van de Velde y su no plan
Foto cabecera: Thomas Maheux
