Vuelta al País Vasco 2022: previa, recorrido y favoritos

El próximo 4 de abril arranca la 61ª edición de la Itzulia a través de su particular recorrido explosivo, sin un metro llano y plagado de puertos. ¿Quién conseguirá la txapela?

La orografía tan singular del País Vasco marca la personalidad explosiva y montañosa, aunque sin grandes puertos, del recorrido de la Itzulia. Una prueba que este año 2022 celebra su 61ª edición y que arranca el próximo lunes 4 de abril, concluyendo el sábado 9 con el habitual fin de fiestas en Arrate. En total, los ciclistas deberán afrontar 25 ascensiones catalogadas -más las que no figuran como puertos puntuables- en los 882 km que completan la ruta a través de las carreteras del País Vasco y Navarra.

Esa naturaleza singular propicia que el perfil de corredores que pueden optar a la victoria es amplio, aunque Primož Roglič parece el gran favorito. Sin embargo, los inesperados cambios de guion que promueve el terreno quebrado, sinuoso, y en ocasiones factible para emboscadas, es sinónimo de espectáculo e incertidumbre. Todo ello aderezado con el siempre apasionado público vasco, que abarrota las cunetas de los puertos para llevar en volandas a los corredores en su camino hacia la txapela que designa el ganador de la Itzulia. 

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Etapa 1 | CRI Hondarribia - Hondarribia | 7,5 km (04/04)

La localidad de Hondarribia será la encargada de inaugurar la 61ª edición de la Vuelta al País Vasco con una contrarreloj ni mucho menos asequible. No tendrá una longitud muy elevada, tan solo 7,5 kilómetros, pero lo hará a través de un terreno que entrelaza tramos sinuosos, técnicos, rampas duras, y hasta adoquines, con rectas llanas para los más rodadores. Precisamente, el inicio desde el paseo de la playa transcurre paralelo a la costa antes de afrontar la subida a San Telmo. 

Un puerto de 1,4 km al 3,9%, pero cuyos primeros 600 metros son por una carretera muy estrecha y con pendientes por encima del 10%. A partir de ese punto, el recorrido se adentra en las calles de Hondarribia, con un repecho del 5,2% y un último kilómetro que cruza el casco antiguo del municipio sobre un empedrado complicado en su tramo inicial y una rampa que alcanza el 9%. Los ciclistas habilidosos podrían plantar cara en la lucha por el primer maillot de líder.

Etapa 2 | Leitza - Viana | 207,9 km (05/04)

El municipio navarro de Leitza —lugar de nacimiento de Mikel Nieve (Caja-Rural)— se estrena como sede de la Itzulia y dará el pistoletazo de salida a la etapa más larga de esta edición de la carrera vasca. El terreno quebrado del inicio, con el puerto de Uitzi (3,7 km al 6,9%) y la ascensión no catalogada hacia Madotz (7 km al 3,5%) será propicio para la creación de la fuga. Desde ese punto se abre una ventana controlable a través de la Comunidad Foral de Navarra, salvo una pequeña incursión hacia La Rioja para visitar su capital, Logroño. 

Los últimos 50 kilómetros vuelven a ser muy movidos, comenzando con el largo y tendido puerto de Aguilar Gaina. En el tramo final se suceden tres repechos en torno a los 900 m y una pendiente media del 5%, que podría ser una ubicación perfecta para tratar de sorprender antes del último kilómetro que vuelve picar para arriba en las calles de Viana, donde John Degenkolb logró su primera victoria en la Vuelta en 2012.

Etapa 3 | Llodio - Amurrio | 181,7 km (06/04)

Una jornada completamente rompepiernas. Los primeros 100 kilómetros serán relativamente asequibles, pero en las dos últimas horas de carrera, el recorrido se adentra en un mar de repechos típicos de la orografía vasco: cortos, pero tremendamente exigentes. Pequeñas ascensiones sucesivas que rondan entre el 4% y el 6% dominadas por el doble paso por el encadenado que forman Opellora (1,1 km al 13%) y el Alto de Ozeka.

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Se trata de una ascensión cercana a los 4 km al 7,4%, pero en el que su tramo central alcanza una pendiente media sostenida durante un kilómetro por encima del 11%. Tras el segundo paso restan 20 km para la línea de meta de Amurrio, aunque todavía faltará la cota de Lezama (500 m al 9,8%), con cima en la Iglesia de San Martín, a menos de seis kilómetros. Sin duda, una etapa al más puro estilo Itzulia que puede presentar una infinidad de alternativas para la victoria. 

Etapa 4 | Vitoria-Gasteiz - Zamudio | 185,6 km (07/04)

En esta jornada, el Alto del Vivero será el gran protagonista. La zona inicial desde la capital vasco, Vitoria-Gasteiz, conduce a los ciclistas hacia la característica costa accidentada de Vizcaya. Un primer paso por la vertiente más constante del Vivero (4,4 km al 7,3%) da paso a un bucle por el litoral atravesando diferentes municipios como Sopela, Plentzia, Gorliz o Armintza. 

La ascensión de Jata y la dureza de Urruztimendi (1,9 km al 11%) será la antesale de la segunda y definitiva subida al Alto del Vivera, esta vez por la zona en la que presenta porcentajes por encima del 10,5% en su tramo inicial. Cuando se corona quedan alrededor de 20 kilómetros para la meta en Amurrio. Aunque se presume como una jornada interesante para intentarlo desde lejos, el recorrido llano después del rápido descenso puede volver a reunificar el grupo.

Etapa 5 | Zamudio - Mallabia | 163,8 km (08/04)

La primera de las dos jornadas consecutivas en las que su recorrido perfila el dibujo de una sierra. Especialmente, esa situación se hace más evidente en los 70 kilómetros finales, donde se suceden hasta cuatro ascensiones de forma consecutiva. A los puertos de Gontzagaraigana y Trabakua se añaden dos subidas que no están categorizadas como son la del primer paso por Mallabia (3 km al 5,6%) y Garai (5,2 km al 4,9%). 

Ese encadenado conducirá a los ciclistas hacia un bucle buscando el esprint de Abadiño y el puerto de Karabieta. Una ascensión de 6,7 km al 5,6%, pero cuyos primeros tres kilómetros mantienen una pendiente media por encima del 8,5%. El descenso rápido, sobre una carretera en buen estado y que serpentea entre las zonas sombrías que proporcionan la arboleda dejará a los ciclistas en los últimos 5 km, que de forma suave pero constante mantiene porcentajes positivos antes de los 600 metros finales con una pendiente del 10,5%.

Etapa 6 | Eibar - Arrate | 135,7 km (09/04)

Como suele ser habitual en la última década, el Alto de Arrate será el colofón a la 61ª edición de la Itzulia. Etapa reina de la carrera, con más de 3.400 metros de desnivel positivo acumulado a lo largo de las siete ascensiones que se suceden en un recorrido de 135 kilómetros. Tan solo los primeros 10 km, junto con los tramos que separan los altos de Gorla y Krabelin -una de las vertientes de Arrate con pendientes por encima del 11%- y Urkaregi con Eibar, darán algo de respiro al pelotón. 

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Una dureza acumulada que culminará en Arrate, esta vez por la vertiente de Usartza. Una ascensión de 4,5 km al 8,8% y que sus tres kilómetros centrales acumula porcentajes superiores al 10%. El último kilómetro es un ligero descenso sinuoso y estrecho, por lo que para resolver la llegada habrá gestionar la colocación y la trazada de las curvas. Se trata de una etapa propicia para darle un vuelco a la general y proponer diferentes situaciones tácticas.

Favoritos

La presencia de Primož Roglič no solo vira el favoritismo hacia su figura, sino que también distorsiona la forma de correr de sus rivales. El esloveno llega a la Itzulia para defender la victoria lograda la pasada temporada en un gran duelo táctico -curiosamente el único que pudimos disfrutar en 2021- con su compatriota Tadej Pogačar. Además, lo hace tras alzarse con el triunfo en la París-Niza. En la carrera francesa no vimos el Roglič arrollador de otras ocasiones, aún así se mimetiza con la personalidad del terreno vasco, con puertos cortos y explosivos. 

Jonas Vingegaard trabajando para Primož Roglič en la edición de 2021 / Fotografía: Charly López

Será interesante ver cómo se compenetra con su compañero Jonas Vingegaard, segundo la edición anterior, y ahora con la jerarquía total dentro de la estructura del Jumbo-Visma. Esta temporada ya ha sido segundo en Tirreno y se llevó la victoria en la Drôme Classic. Ambos tienen el potencial y la capacidad para conseguir la victoria y el año pasado demostraron que pueden moverse con inteligencia.

Ante la superioridad de los eslovenos reina una especie de conformidad en el pelotón de la que no quiere formar parte Remco Evenepoel. El belga fue incisivo en la Tirreno-Adriatico, por lo que en la Itzulia podría tratar de desestabilizar también al Jumbo con su particular forma agresiva de competir. Podríamos decir que su idilio con las grandes victorias comenzó en el País Vasco, cuando maravilló con su descaro en la Clásica de San Sebastián 2019. Es un terreno al que se adecúa bien, por lo que será un ciclista importante. Tras un inicio algo sombrío, también buscará su cuota de protagonismo el Campeón del Mundo, Julian Alaphilippe. 

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El ciclismo español no contará con las figuras de Mikel Landa, centrado en su preparación para el Giro, o la de Juan Ayuso, baja de última hora por una enfermedad. Sin embargo, sí que estarán presentes Pello Bilbao (Bahrain-Victorious), Enric Mas (Movistar Team) o Marc Soler (UAE Team Emirates) como posibles aspirantes a la victoria. 

Quizá el balear del conjunto telefónico deberá asumir más responsabilidades en la lucha por la general, para medirse principalmente ante Roglič, pero tanto Bilbao como Soler, con mayor libertad sin un líder establecido, son dos ciclistas que pueden aprovechar su capacidad rematadora para hacerse fuertes en un terreno que dominan.

Pello Bilbao durante la nevada ascensión al Monte Carpegna en Tirreno / Fotografía: Sprint Cycling

En esa lista también podríamos incluir a Carlos Rodríguez, aunque compartirá filas en el conjunto Ineos-Grenadiers con corredores de la talla de Daniel Felipe Martínez y Adam Yates, tercero y cuarta en la París-Niza; o Geraint Thomas, que regresó a la competición de forma muy relajada en la Settimana Coppi e Bartali. Sin duda, el bloque del equipo británico en la Itzulia es muy fuerte y cuentan con un ciclistas que conoce el terreno a la perfección como es Omar Fraile, esencial en posibles movimientos tácticos.

El conjunto Bora-Hansgrohe también se presenta a la Itzulia con un equipo muy sólido, tanto para la lucha por etapas como para intentar el asalto a la clasificación general. En la primera faceta, el alemán Lennard Kämna, ganador de una etapa en 2021, parece el mejor situado por su capacidad de solventar fugas de nivel. Con respecto al maillot de líder, tanto Aleksandr Vlasov como Sergio Higuita, flamante ganador de la Volta Catalunya tras una jornada sensacional bajo la lluvia junto a Carapaz, serán los encargados de liderar el equipo.

La naturaleza del recorrido de la Itzulia suele deparar distancias no muy grandes entre los primeros clasificados, por lo que la nómina de aspirantes a la victoria puede ser muy amplia con la posibilidad de filtrarse en grupos cabeceros. Por ello, tampoco hay que descartar de la ecuación a ciclistas como David Gaudu (Groupama-FDJ), ganador en la jornada decisiva de Arrate en 2021, Ion Izagirre (Cofidis), ganador de la carrera en 2019, o Mark Padun (EF Education-Easy Post).