Análisis de las plantillas del WorldTour 2023 (I parte)

Con la nueva temporada al acecho y la inmensa mayoría de fichajes realizados, empezamos una serie de tres artículos que analizan las plantillas de los dieciocho equipos World Tour.

Partiendo de un breve balance de su 2022, repasamos las caras nuevas, las despedidas, los nombres más importantes y los jóvenes candidatos a llamar a las puertas del éxito de todos los equipos del WorldTour masculino. Aquí van las seis primeras escuadras de esta primera entrega:

ALPECIN-DECEUNINCK

¿Cómo les fue en 2022?

Cuando Mathieu van der Poel, el corredor estrella, solo aporta resultados de enjundia de marzo a mayo y aun así se alcanzan las treinta y cuatro victorias, significa que el equipo ha funcionado. El gran rendimiento coral se constata al ver que los éxitos llegaron de la mano de trece corredores distintos. Más allá de la pluralidad de victorias, su nivel: ganaron etapas en el Giro, en el Tour, en la Vuelta y se llevaron el monumento de su tierra, el Tour de Flandes.

Altas: Soren Kragh Andersen (Team DSM), Robbe Ghys (Sport Vlaanderen - Baloise), Kaden Groves (Team Jayco - AlUla), Quinten Hermans (Intermarché - Wanty - Gobert Matériaux), Jensen Plowright (Equipe continentale Groupama-FDJ), Ramon Sinkeldam (Groupama-FDJ).

Bajas: Edward Anderson, Sjoerd Bax (UAE Team Emirates), Floris De Tier (Bingoal - WB), Tim Merlier (Soudal - Quick Step), Guillaume Van Keirsbulck (Bingoal - WB), Julien Vermote, Jay Vine (UAE Team Emirates).

Quinten Hermans saluda a su compatriota Remco Evenepoel en el pódium de la Lieja-Bastoña-Lieja (Foto: A.S.O./Gautier Demouveaux)

La marcha de Merlier es una pérdida notable para los esprints, pero está mitigada por la llegada de Groves, aún un peldaño por debajo en velocidad pura, pero con margen de progresión y mayor capacidad de pasar puertos: ahí está su gran actuación en la dura etapa tarraconense de la pasada Volta, marcada por la lluvia y la galopada de Carapaz e Higuita.

Hay que contar también con la incorporación a última hora al equipo de desarrollo del prometedor Axel Laurance, por estar completa la primera plantilla. Con esta ficha no podrá competir en calendario WT, pero es un refuerzo muy interesante.

Hermans, una de las revelaciones de 2022, y el irregular pero brillante en sus mejores días Kragh Andersen suben el nivel del equipo en clásicas de distinto pelaje y etapas quebradas. Por su parte, Sinkeldam es un buen refuerzo como corredor de equipo, experimentado para el llano y las llegadas, y Plowright es una apuesta de futuro en ese mismo terreno. Eso sí, con el adiós de Vine el equipo queda prácticamente huérfano en cuanto presencia en la alta montaña, más allá de lo que puedan arañar en escapadas.

Relacionados - Luis León Sánchez: "El ciclismo antiguo ya no sirve"
Relacionado - Recorrido del Tour de Francia 2023: etapas y perfiles

Mathieu van der Poel (Foto: Getty)

Los pilares del equipo

Los focos se los lleva Mathieu van der Poel, con todo merecimiento, pero la fiabilidad de Jasper Philipsen, ya instalado y consolidado en la élite de los esprints, obliga a incluirlo también en el primer rango de la escuadra. Además de ser capaz de ganar a cualquiera, un Philipsen a este nivel es un manantial de puntos UCI para su equipo. En 2023 empieza el nuevo trienio y todo colchón será muy bienvenido.

De Van der Poel, por mucho que haga sus incursiones en el ciclocross y en la bici de montaña, cabe desear que logre completar una temporada en la ruta sin contratiempos ni lesiones. El talento está ahí, la magia también, pero ahora falta traducirlo en resultados más sostenidos. En su lista de ambiciones prioritarias debería figurar conquistar al fin la París-Roubaix, sacarse la espina del absurdo incidente del pasado Mundial, volver a ser relevante en el Tour de Francia y no faltar a su cita con la victoria en Flandes.

Tras estos dos nombres mencionados, serían los tres principales nuevos fichajes, Kragh Andersen, Hermans y Groves, los siguientes en la jerarquía. Al menos en clave de resultados individuales, más allá de ayudas y alternativas que puedan ofrecer a Van der Poel y Philipsen cuando coincidan con ellos.

Talento emergente

Groves acaba de cumplir los veinticuatro años, y puede subir más peldaños, pero su temporada de eclosión ha sido la anterior. Así que en este capítulo nos fijamos en Fabio Van Den Bossche (22) quien ya ha estado en el equipo en 2022, aunque sin resultados reseñables. Le damos un voto de confianza por sus dos temporadas previas en Sport Vlaanderen - Baloise, donde había ofrecido destellos de talento y solidez para su edad. Corredor tirando a ligero, apunta a un perfil enfocado a vueltas por etapas.

Relacionado - Retirarse con estilo: Valverde, Nibali, Nieve...
Relacionado - Suscríbete a VOLATA, tu revista de cultura ciclista

BORA - HANSGROHE

¿Cómo les fue en 2022?

Con toda seguridad la mejor temporada de la historia de la estructura, curiosamente el año uno después de Peter Sagan. Ganaron su primera gran vuelta, el Giro (Hindley), pero también la Volta a Catalunya (Higuita), el Tour de Romandia (Vlasov) y las dos pruebas de un día de rango máximo que se celebran en Alemania: en Frankfurt con Bennett y en Hamburgo con Haller. Solo les faltó ganar en el Tour —Kämna estuvo muy cerca— pero Vlasov se apuntó una quinta plaza en la general final.

Jay Hindley (Bora-Hansgrohe) junto a Ricard Carapaz, Mikel Landa y Alejandro Valverde en el Giro de 2022 que finalmente se adjudicaría el primero (Foto: Getty)

 

Altas: Nico Denz (Team DSM), Bob Jungels (Ag2r - Citröen Team), Victor Koretzky (B&B Hotels - KTM), Florian Lipowitz (Tirol - KTM Cycling Team).

Bajas: Felix Großschartner (UAE Team Emirates), Wilco Kelderman (Jumbo - Visma), Martin Laas (Astana Qazaqstan Team), Lukas Pöstlberger (Team Jayco - AlUla).

Tal vez las bajas superen en nombre las altas, pero no debe suponer una pérdida de nivel para el equipo. Kelderman ha dado la sensación en 2022 de haber cumplido ciclo dando su paso al de Vlasov, Hindley e Higuita, y tres cuartos de lo mismo con Großschartner. Si Jungels confirma los signos de recuperación mostrados el pasado Tour de Francia puede perfectamente llenar el vacío que dejan. Por su parte, a día de hoy Denz parece tener un nivel superior al de Pöstlberger como trotón y hombre de equipo para todos los terrenos.

El mountainbiker Koretzky, más allá de alguna pequeña incursión en el calendario de clásicas de primavera, seguirá enfocado mayoritariamente fuera de la carretera. En los últimos tiempos no son pocos los equipos que apuestan por estar presentes también en otras disciplinas del ciclismo, ni que sea por razones comerciales.

Los pilares del equipo

La marcha de Sagan y su séquito ahora hace un año llevaron a una remodelación profunda de la plantilla hacia un modelo que renuncia a una gran estrella y apuesta por la pluralidad de opciones. Como hemos visto, ha sido una estrategia que ya ha dado sus frutos.

Los nombres que apuntalaron esta nueva etapa deben continuar con su cometido en 2023. Hablamos de Hindley y Vlasov como jefes de fila previstos en Tour y Giro respectivamente; de Higuita con galones para destacar en clásicas duras y vueltas por etapas, si bien al menos por ahora no ha pillado el punto a las tres semanas en términos de clasificación general; de Sam Benett y Danny Van Poppel como dupla para aspirar a todo en las llegadas; o de Nils Politt como buscavidas para destacar, y quién sabe si ganar, en clásicas de adoquines y en fugas en grandes vueltas.

Relacionado - Carlos Rodríguez: "Aspiro a ganar grandes vueltas"

Nils Politt durante la presentación de equipos de la Eschborn Frankfurt de 2022 (Foto: Marcel Hilger)

Mención aparte merecen los casos de Schachmann y Buchmann, quienes parecen haber perdido jerarquía en el equipo y en el pelotón en general. De hecho, Schachmann quizás solo viene de un mal año y Buchmann, sin ser el corredor que rozó el podio del Tour en 2019, anduvo razonablemente bien en el pasado Giro. Por edad y curva de rendimiento, ambos pero sobre todo el primero, están a tiempo de regresar a sus mejores versiones.

Talento emergente

La elección parece clara en este apartado. Cian UIjtdebroeks no solamente ha ganado con cierta autoridad el Tour de l’Avenir, sino que ha cuajado una primera temporada en profesionales bastante meritoria para un corredor de diecinueve años. No ha sido comparable por supuesto al 2019 de Evenepoel, pero no ha andado tan lejos del 2018 de Pogačar. Con estos paralelismos no queremos decir que a no mucho tardar va a rondar los niveles de las dos estrellas mencionadas -además, con muy poca experiencia extra, Ayuso ya ha subido al podio de la Vuelta. Eso sí, se trata del corredor de su añada con más credenciales, como mínimo a día de hoy.

COFIDIS

¿Cómo les fue en 2022?

Empezaron la temporada justo fuera de las 18 plazas que garantizaban la licencia WT para el trienio 2023-2025, así que enfocaron el año a ese objetivo. Los más de 8000 puntos cosechados (el décimo mejor equipo) les han permitido superar el corte, sobre todo sacando petróleo del calendario francés y belga.

Guillaume Martin y Jon Izagirre volverán a ser los jefes de filas de un Cofidis que en 2023 se ha reforzado poco (Foto: A.S.O./Gautier Demouveaux)

Eso sí, más allá de los puntos UCI, apenas han brillado en carreras de primerísimo nivel. Cabe destacar la Itzulia de Ion Izagirre (segundo y una victoria de etapa), el sorprendente podio de Geschke en Romandia y la presencia de Guillaume Martin a lo largo del año.

Altas: Jonathan Lastra (Caja Rural - Seguros RGA), Axel Mariault (Team U Nantes Atlantique), Christophe Noppe (Team Arkea - Samsic), Harrison Wood (AVC Aix-en-Provence).

Bajas: Sander Armée, Tom Bohli (Tudor Pro Cycling Team), Szymon Sajnok (Q36.5 Pro Cycling Team), Kenneth Vanbilsen (se retira), Davide Villella.

Cambios poco sustanciales. Las bajas son de corredores que no se hallaban entre los más relevantes del equipo, una mezcla de veteranos y ciclistas más jóvenes que no habían acabado de cuajar. En el apartado de incorporaciones cabe destacar que a Jonathan Lastra le llega la oportunidad de correr en un equipo WT que llevaba alguna campaña mereciendo. Mariault también había presentado credenciales para una plaza en una escuadra de mayor categoría tras frecuentar este último año posiciones delanteras en el calendario francés.

Relacionado – Una vuelta a casa distinta - La Mirada Maté
Relacionado - VOLATA Radio podcast: con Haimar Zubeldia y Laura Meseguer

Los pilares del equipo

Martin, Izagirre y Coquard deben asumir la responsabilidad y de sus resultados dependerá en buena medida la valoración que se le pueda hacer al equipo. El primero es un corredor consolidado, con cierto carisma además, e intentará sacarse la espina del infortunio del Tour de Francia pasado, en el que tuvo que abandonar por Covid. Por su parte, Izagirre cumplirá en febrero los treinta y cuatro años, una edad en la que empiezan a surgir dudas sobre si los mejores días ya quedaron atrás. Por ahora no hay indicios relevantes que conduzcan al pesimismo, pero la cautela es comprensible.

Coquard debería mejorar un año tirando a mediocre. Si no median infortunios, el velocista de Saint-Nazaire va a sumar puntos. Pero alguna victoria WT también se le puede pedir teniendo en cuenta lo que le cuesta al equipo levantar los brazos.

Más allá de estos tres nombres, un corredor que consiguió vencer en 2022 fue Jesús Herrada, que se anotó una etapa de la Vuelta. En su olfato y consistencia confía el equipo una temporada más. Buenos augurios también sugiere Max Walscheid, velocista reciclado a rodador, pedrusquero y contrarrelojista; un outsider en las carreras que se adapten a su perfil. Por su parte, Benjamin Thomas ha subido su nivel general justamente el año que bajaron sus resultados en contrarreloj, la especialidad en la que empezó a destacar como buen corredor que alterna la carretera con la pista. En 2022 tuvo mucha presencia y para el nuevo año se espera que refrende este rol propositivo.

Talento emergente

No se detecta en la plantilla ningún corredor verdaderamente ilusionante de veintitrés años o menos, el umbral que nos marcamos oficiosamente en esta sección. Así que tenemos que acudir a un ciclista de veinticuatro años recién cumplidos: Axel Zingle. Aguerrido, hábil en pruebas de un día con cotas, con punta de velocidad… podríamos poner sobre la mesa el nombre de Cosnefroy como tipo de corredor al que se puede asemejar.

En 2022 ha sido un puntal en la cosecha de puntos para asegurar la continuidad de Cofidis como WT, si bien sus grandes resultados han sido sobre todo en pruebas de segundo rango. Habrá que ver si es capaz de traducir este desempeño en carreras de más prestigio. En todo caso, es un ciclista a seguir de muy cerca ya que no parece haber llegado a su cenit. 

Relacionado - El recorrido del Giro 2023: análisis y etapas
Relacionado – VOLATA#35, el camino de la juventud

EF EDUCATION-EASYPOST

¿Cómo les fue en 2022?

Otra de las estructuras que pasaron la última temporada inmersas en la lucha para seguir siendo World Team. Eso sí, durante la primera parte del año parecía que la cosa no fuera con ellos, sobre todo si uno seguía las declaraciones de su mánager, el inefable Jonathan Vaughters, contrario al sistema de ascensos y descensos. Sea como fuere, salvaron su plaza a pesar de un ejercicio bastante flojo: fueron el decimoctavo equipo en puntos UCI y pocas victorias y logros de renombre. Las etapas conseguidas en Tour y Vuelta por Magnus Cort Nielsen y Rigoberto Urán respectivamente y la buena imagen de Neilson Powless —y de manera más puntual de Guerreiro y Bettiol— fueron sus mejores logros.

Neilson Powless, en el centro, durante la Klasikoa de San Sebastian de 2021 (Foto: Getty)

Altas: Andrey Amador (INEOS Grenadiers), Richard Carapaz (INEOS Grenadiers), Stefan De Bod (Astana Qazaqstan Team), Mikkel Frølich Honoré (Quick Step - Alpha Vinyl Team).

Bajas: Daniel Arroyave (Orgullo Paisa), Ruben Guerreiro (Movistar Team), Sebastian Langeveld (se retira), Hideto Nakane (se retira).

Hay pocos movimientos, pero cualitativamente relevantes. Para empezar, porque con Carapaz han fichado un corredor que pasa a ser el buque insignia de la plantilla, su líder para la general de las principales vueltas por etapas, con el Tour de Francia a la cabeza. Luego, con Honoré incorporan un ciclista todoterreno, de nivel, y todavía joven, que sorprende que Quick-Step haya dejado escapar. Y con De Bod y Amador dotan de profundidad a la plantilla con, respectivamente, un contrarrelojista que también anda en otros terrenos y un gregario muy experimentado.

En el apartado de bajas, solo la de Guerreiro parece destacable, así que el saldo es favorable. También cabe hacer notar que Michael Valgren afronta el año con ficha del equipo de desarrollo ya que sigue su proceso de recuperación de la grave caída que sufrió el pasado junio en la Route d’Occitanie.

Los pilares del equipo

Hemos mencionado ya que Carapaz será el referente principal de una plantilla con un nivel medio notable, pero algo escasa de piezas ganadoras. El ecuatoriano tiene nivel para salir airoso del reto y nunca ha sido un líder que necesitase estar muy arropado; se desenvuelve a las mil maravillas corriendo a su aire y aprovechando situaciones de carrera poco ordenadas.

Urán ha sido la referencia en grandes vueltas del equipo y ahora estará liberado de esta responsabilidad. Quizás ya no es el mismo de hace unas temporadas, pero que su talante dicharachero no nos engañe: su nivel sigue siendo suficiente para cosechar resultados. Veremos si logra sostenerlo una temporada más.

Powless fue el corredor de la plantilla que durante 2022 sumó más puntos UCI. Cifras al margen, es indudable que el estadounidense ha dado otro paso más. Su Tour de Francia fue vistoso, mereció tal vez una etapa y su decimosegundo puesto final no lo logró a base de regular, sino pasando buena parte de la carrera en fuga. Apareció en otros momentos de la temporada sacando buenos puestos en algunas pruebas de máximo rango. Tiene veinteséis años, es razonable pensar que puede seguir subiendo su nivel.

Bettiol ha tenido fases buenas durante 2022, pero sin excesiva fortuna. Un invierno y una primavera sin incidentes le posicionarían como un nombre muy importante tanto en clásicas como para aspirar a parciales en vueltas por etapas.

Entre los que tuvieron un 2022 flojo y de los que cabe esperar más, destacan los nombres de Hugh Carthy y Stefan Bissegger. No sabemos si atrevernos a sumar a esta lista a Mark Padun, uno de los ciclistas más desconcertantes e imprevisibles del pelotón internacional. 

Relacionado - Education First: de los patos a los dragones

El británico Hugh Carthy espera volver a alzar los brazos en 2023 tal y como hizo en carreras como la Vuelta a Burgos de 2021 (Foto: Getty)

Talento emergente

Reclutado a mitad de temporada pasada, Andrea Piccolo (veintiún años) hizo una recta final de campaña muy meritoria, con protagonismo en pruebas de un día con cierto desnivel. La media montaña parece su terreno, pero aún no se le ha testado lo suficiente en la alta montaña y en las pruebas por etapas para descartarlo como futurible hombre para generales. A ver qué calendario y objetivos le plantea el equipo en su primer curso completo.

INEOS GRENADIERS

¿Cómo les fue en 2022?

Primera temporada sin ganar ninguna gran vuelta desde 2014. El dato empuja a calificar el año de fracaso para la poderosa estructura británica, pero en cualquier caso sería un juicio a matizar: el accidente de Bernal en enero, su mayor candidato, es clave en el análisis. Además, no hubo victorias pero sí dos podios, con un tercer puesto de Thomas en el Tour que quizás supo mejor que el segundo de Carapaz en Italia.

Geraint Thomas en la Itzulia 2022 (Foto: Getty)

Más allá de grandes vueltas, la cosecha del equipo en pruebas de un día fue satisfactoria. Ya solamente la victoria en Roubaix de van Baarle y su segundo puesto en Flandes amortizan la campaña de clásicas, pero, además, hay que sumar la Amstel Gold Race de Kwiatkowski y el buen papel de los jóvenes, con la Flecha Brabanzona de Sheffield como paradigma. En vueltas de una semana siguieron siendo una escuadra voraz, anotándose Itzulia (Martínez), Suiza (Thomas) y Polonia (Hayter).

Altas: Thymen Arensman (Team DSM), Leo Hayter (Hagens Berman - Axeon), Michel Leonard (júnior), Connor Swift (Team Arkéa Samsic), Joshua Tarling (júnior).

Bajas: Andrey Amador y Richard Carapaz (EF Education-EasyPost), Eddie Dunbar (Team Jayco - AlUla), Richie Porte (se retira), Dylan van Baarle (Jumbo-Visma), Adam Yates (UAE Team Emirates).

El equipo dice adiós a algunos de sus corredores más laureados el año pasado, incluso con van Baarle y Yates reforzando equipos poderosos que son rivales directos. Por el contrario, en el apartado de altas predominan las apuestas de futuro. Dos juniors que suben directamente a profesionales y a los que habrá que darles tiempo por buenos que sean, un Leo Hayter al que se le puede aplicar tres cuartos de los mismo en clave 2023 y, ya sí, dos corredores algo más hechos. Arensman ha sido una de las revelaciones de la temporada pasada en vueltas por etapas, pero tampoco alcanza por ahora la jerarquía que tenían Carapaz y Yates.

Swift, por su parte, puede ser un muy buen corredor de equipo, ejercer quizás de relevo natural de Rowe, pero en ningún caso suena probable que vaya a cosechar los éxitos de van Baarle este último año. Así, una pregunta asoma: ¿tienen ciertas garantías de que Bernal sea el fichaje más importante de la temporada?

Relacionado - Siete cosas que no sabías de Tom Pidcock

Los pilares del equipo

Hay que empezar este apartado enlazando con la última frase del anterior. La aportación de Bernal esta temporada es una incógnita. De cómo se resuelva esta incertidumbre va a depender el balance anual, puesto que el equipo ya no es ese armario sin fin de candidatos para las generales.

Además de Bernal, está Thomas, que con treinta y seis años ya ha anunciado que correrá el Giro; Daniel Felipe Martínez, mucho más fiable en vueltas de una semana aunque todavía no le descartaríamos para un podio en una grande; Carlos Rodríguez, que aun con su juventud ya ha demostrado que lo suyo va en serio y apunta a la Vuelta; Tao Geoghegan Hart, a quien no habría ya que tratarle como un ganador del Giro, sino como un buen corredor sin más; y más allá vendrían apuestas más audaces como Pidcock, esperando que explote como corredor de tres semanas, algo no descartable; o que otros jóvenes como Arensman, Plapp o Tulett tomen ya el relevo incluso en las plazas más importantes, aspiración aún con poca base si de lo que hablamos es de luchar por los primerísimos puestos.

En las clásicas, sin van Baarle, Pidcock debe dar un paso al frente tras una mala campaña primaveral en 2022. Junto a él, dos corredores también jóvenes que han causado muy buena impresión: Ben Turner y Magnus Sheffield. Jonathan Narváez es otra pieza más que útil y de un Michal Kwiatkowski que ya apunta a crepuscular se puede esperar alguna aparición destacada pero puntual.

Tom Pidcock, ya con la equipación de la temporada 2023, se podrá centrar en las grandes vueltas (Foto: Ineos Grenadier)

Talento emergente

Todos los nombres que encajan en esta categoría ya han aparecido en este informe, así de relevante es su papel en el equipo. Pero vamos a detenernos un poco más en Leo Hayter (veintiún años): se apuntó el pasado Giro Sub23, un aval notable si tenemos en cuenta que los anteriores vencedores fueron Ayuso y Pidcock. Cimentó su victoria en una cabalgada en solitario en la durísima etapa reina, donde metió 5 minutos al segundo, pero luego flaqueó ligeramente en la Fauniera.

Su hoja de resultados en sub23 nos muestra un buen palmarés (ha ganado también la Lieja-Bastoña-Lieja), su versatilidad (fue bronce en el último mundial de contrarreloj), pero también que es corredor de ofrecer un grandísimo rendimiento en días concretos más que de dominar el calendario a lo largo de la temporada. Tiempo tiene para ir ganando consistencia.

MOVISTAR TEAM

¿Cómo les fue en 2022?

Claramente, de menos a más. Los primeros meses de la temporada fueron dubitativos cuando no preocupantes. Acechaba el fantasma de la relegación a ProTeam para el nuevo trienio. Solamente el de siempre, Valverde, cosechaba resultados destacados. Enric Mas mostraba buenas piernas pero las caídas lastraban sus clasificaciones y el grupo de clásicas pasaba demasiado inadvertido.

Enric Mas, rodeado de Tadej Pogacar y Domenico Pozzovivo en la pasada edición del Giro dell'Emilia (Foto: Sprint Cycling Agency / Movistar Team)

La tendencia se invirtió pasado el Tour, con Mas rayando a un nivel altísimo en la Vuelta y la clásicas italianas, y los Serrano, Cortina y Aranburu venciendo en Gran Bretaña, Piemonte y Limousin respectivamente. Eso sí, a pesar de los puntos sumados, el balance sigue siendo parco en victorias, con un solo triunfo en el World Tour, el de Verona en la séptima etapa del Dauphiné.

Altas: Fernando Gaviria (UAE Team Emirates), Ruben Guerreiro (EF Education-EasyPost), Ivan Romeo (Hagens Berman - Axeon).

Bajas: Iñigo Elosegui (Equipo Kern Pharma), Alejandro Valverde (se retira).

Empieza una nueva era para el equipo. Suena solemne pero no es para menos. El año uno sin Valverde significa entrar en terreno desconocido. El enorme hueco que deja el murciano no lo llenará nadie, pero se ha reclutado a Gaviria y Guerreiro para dotar de más profundidad y opciones a la plantilla.

Relacionado - VOLATA Radio podcast: entrevista con Iván García Cortina y Carla Nafría
Relacionado - En modo Flecha: Badlands, una nueva dimensión

En el caso del colombiano, supone por parte de la estructura una apuesta casi sin precedentes en el ámbito de los sprints. La experiencia no ha ido del todo mal con Kanter, un nombre más modesto y que suma puestos pero no consigue levantar los brazos. De Gaviria se espera que aporte alguna victoria. Se halla en un punto delicado de su carrera, lejos de sus números de hace unas temporadas. Pero solo tiene veintiocho años y la necesidad de reivindicarse debe ser su motor. Eso sí, el equipo deberá arroparle mínimamente y tampoco parece haber muchos mimbres para ello.

En lo que refiere al portugués, su incorporación será valiosa si replica sus mejores momentos de la pasada temporada y más si les dota de continuidad. En bastantes momentos de la temporada tendrá opción para el brillo personal en la montaña. ¿Una buena carta a la que otorgar libertad en el Giro?

Iván Romeo es una inversión de futuro. Alto y fuerte, posee prometedoras condiciones como rodador.

Los pilares del equipo

Lo expresó él mismo en la presentación del equipo del pasado 21 de diciembre: Enric Mas debe asumir los galones que deja Valverde. La verdad es que no cambia mucho la situación respecto a lo que vivió en 2022. Por una parte, ya fue un corredor con los focos muy encima, al menos por parte de la prensa y afición españolas y de un modo no siempre amable; por otra, sus grandes objetivos serán los mismos, Tour y Vuelta. El buen sabor de boca que dejó la recta final de la pasada temporada deben darle la confianza para intentar asaltar el podio del Tour y rascar alguna victoria parcial aquí o allá.

Para las clásicas en 2023, Iván García Cortina volverá ser una de las bazas del Movistar Team (Foto: Sprint Cycling Agency / Movistar Team)

Tres apellidos que a menudo se conjugan juntos, Aranburu, Cortina y Serrano, deberían mejorar lo conseguido la primavera pasada, que fue muy poco. Por otra parte, la falta de urgencias de puntos al tratarse del primer año del trienio puede que les abra la puerta a correr alguna gran vuelta, cosa que no sucedió en 2022.

Relacionado - Suscríbete a VOLATA, tu revista de cultura ciclista

Carlos Verona ha vivido este último año su mejor temporada, tanto en el rol de ayudante como en lucimiento personal. Con treinta años recién cumplidos ha llegado a su madurez y se encuentra plenamente capacitado para conseguir resultados para sí mismo que mejoren esa victoria en Dauphiné. Con los recién llegados Gaviria y Guerreiro, y a la espera que Jorgenson dé otro pasito más, completa esa segunda línea de la plantilla que idealmente debe amortiguar, en parte, el impacto de la ausencia de Valverde.

Talento emergente

La primera campaña en el equipo para Oier Lazkano (veintitrés años) no se puede tildar de espectacular, pero sí ha dado destellos de un potencial que permite ser optimistas. Ha trabajado mucho para otros compañeros, en el Giro se mostró más de lo que los resultados pueden hacer pensar y a partir de verano dio su mayor potencial. La brillante victoria en el Tour de Valonia, ante corredores de cierto nivel y especialistas en terreno quebrado, debe ser el camino. El vitoriano es un trotón adaptado a aventuras de larga distancia, supera notablemente pequeñas subidas y está evolucionando como contrarrelojista. Si se le cuida y enfoca adecuadamente apunta a algo más que un valioso gregario para el llano.

Imagen cabecera: Charly López

Relacionado - Análisis de las plantillas World Tour (II parte): Jumbo-Visma, Arkea Samsic, DSM, Jayco Alula, Trek Segafredo, UAE Team Emirates

Shop now